La adicción se define como un "trastorno caracterizado por la búsqueda compulsiva de recompensa y/o alivio que proporciona el consumo de sustancias o la realización de determinadas conductas".
Hasta hace relativamente poco tiempo se consideraba que sólo podía hablarse de “adicción” cuando había una sustancia que creaba esa adicción (adicción al alcohol, adicción al tabaco, adicción a la heroína, adicción a ciertos medicamentos…). Sin embargo, hoy en día, sabemos que determinados comportamientos pueden llegar a convertirse también en adictivos (adicción al juego, adicción al sexo, adicción a internet, adicción a los videojuegos, adicción a las compras, etc.).
Características generales de las adicciones.
- Existe un deseo persistente de consumo de la sustancia / realización del comportamiento adictivo
- Se continúa consumiendo la sustancia / llevando a cabo la actividad adictiva a pesar de que ello causa un malestar y un deterioro importante (en la salud física o psicológica de la persona, en las relaciones sociales, la economía, el rendimiento escolar o laboral, las relaciones familiares, causa problemas legales, etc.)
- Se da un aumento de la tolerancia a la sustancia /actividad adictiva (se necesita consumir o realizar cada vez más la conducta adictiva para notar los efectos deseados)
- Se consume la sustancia o se lleva a cabo la conducta adictiva con mayor intensidad o frecuencia de lo que se pretendía en un principio.
- La persona realiza esfuerzos por controlar su consumo / comportamiento adictivo sin conseguirlo.
- Aparecen síntomas de abstinencia cuando se deja de consumir o de llevar a cabo la actividad adictiva. Los síntomas de abstinencia son diferentes en función de la sustancia o actividad y pueden ser físicos (sudoración, temblor, dolor de cabeza, debilidad, etc.) y/o psicológicos (irritabilidad, nerviosismo, deseos persistentes de consumir la sustancia, problemas de concentración, cambios en el estado de ánimo…)
- Se continúa consumiendo la sustancia o llevando a cabo la actividad adictiva para librarse de los efectos negativos que se padecen cuando se mantiene abstinente.
- Se emplea mucho tiempo en actividades relacionadas con el consumo o realización de la conducta adictiva o se abandonan otras actividades.
¿Cuándo acudir al psicólogo?
Si sientes que necesitas una sustancia para poder estar “bien”, si el consumo está teniendo consecuencias negativas en tu vida o en tu salud, si sientes que tu adicción "te controla", si quieres abandonar un hábito o comportamiento que resulta perjudicial pero no te sientes capaz o no sabes cómo, una terapia psicológica puede ayudarte.
* Este artículo es meramente informativo y en ningún caso sustituye a la evaluación ni el asesoramiento profesional